Nota de prensa

CaixaBank emite su primer bono verde subordinado en formato Tier2 por importe de 1.000 millones de euros

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• Con esta emisión, CaixaBank se convierte en el banco europeo con más volumen de bonos ESG (medioambientales, sociales y de gobernanza) emitidos en el mercado de crédito euro.

• La demanda ha superado los 3.000 millones de euros y refuerza el posicionamiento de CaixaBank como banco comprometido con la sociedad, el medio ambiente y la lucha contra el cambio climático.

• Simultáneamente, se ha lanzado una oferta de recompra con el objetivo de reemplazar financiación tradicional por financiación verde.

CaixaBank ha realizado su segunda emisión en 2021 bajo el marco de bonos verdes, sociales y sostenibles que la entidad publicó en agosto de 2019, para apoyar los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas. Se trata de la quinta emisión que realiza la entidad dentro del ODS Framework, tras la emisión de un bono verde a ocho años en febrero de 2021, un bono verde a seis años en noviembre de 2020 y otros dos bonos sociales en septiembre de 2019 y julio de 2020.

La entidad ha emitido un bono verde subordinado Tier 2 por un importe de 1.000 millones de euros a un plazo de 10 años y 3 meses, con opción de cancelar anticipadamente el bono a partir del quinto año. Esta emisión es la primera de un bono verde subordinado en formato Tier 2 por parte de un banco español.

El precio de la emisión se ha fijado en 163 puntos básicos sobre el midswap, 32 puntos por debajo de los 195 puntos básicos ofrecidos en el anuncio, gracias a la gran demanda obtenida, que ha superado los 3.000 millones de euros. El cupón ha quedado establecido en el 1,25%, lo que representa el cupón más bajo ofrecido por CaixaBank en una emisión de deuda subordinada.

El carácter verde de la emisión ha permitido reducir el coste entre 5 y 10 puntos básicos, con respecto al nivel de financiación tradicional, lo que en el mercado se conoce como “greenium” o prima negativa conseguida por el elevado apetito inversor en activos verdes.

De acuerdo con los bancos que han participado en la transacción, un 92% de los bonos han sido adjudicados a inversores reconocidos en el mercado como inversores socialmente responsables (SRI) y entre estos, el 65% cuenta con el mayor reconocimiento en inversión responsable (“Dark SRI”).

La emisión espera contar con una calificación Ba1/BBB-/BBB- por Moody’s, S&P y Fitch. Los bancos colocadores de esta nueva emisión han sido BofA Securities, CaixaBank, J.P. Morgan, Nomura y Société Générale.

Oferta de recompra

De forma simultánea a esta nueva emisión, CaixaBank ha lanzado al mercado una oferta pública de compra sobre un bono subordinado existente con un valor nominal de 1.000 millones de euros, con vencimiento en 2027 y opción de cancelación anticipada en febrero de 2022 (ISIN XS1565131213). La operación pone de manifiesto el esfuerzo que está realizando CaixaBank en optimizar el coste de su estructura de capital ya que este ejercicio le permitirá ahorrar el coste de los futuros cupones de los bonos recomprados, a la par que ofrece liquidez a los inversores que quieran mantener su exposición en deuda subordinada de CaixaBank.

La oferta de compra cuenta con la autorización previa del Banco Central Europeo, es completamente voluntaria y estará abierta a los bonistas que deseen vender sus bonos a un precio de 103,10%. El calendario de la operación establece como fecha límite el próximo 16 de marzo, para aquellos tenedores que quieran acogerse a la oferta.

Destino de los fondos e impactos ambientales estimados

 A través de esta tercera emisión, CaixaBank canalizará fondos para financiar proyectos que contribuyan a una sostenibilidad medioambiental, tales como la reducción de gases de efecto invernadero, la prevención de la contaminación y la adaptación al cambio climático. Concretamente, y en línea con su emisión inaugural, destinará los fondos captados a promover los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) número 7 y 9. El ODS número 7 (energía asequible y no contaminante) y el ODS número 9 (industria, innovación e infraestructuras) persiguen la construcción de infraestructuras resilientes, la industrialización sostenible y el fomento de la innovación.

En este sentido, aplicando los más estrictos criterios de selección de acuerdo con las políticas de Riesgos Medioambientales del banco, CaixaBank ha identificado a 31 de diciembre 2020, más de 4.200 millones de euros de activos elegibles. De los que, 3.600 millones de euros son activos que financian proyectos de energías renovables y más de 600 millones de euros en activos inmobiliarios con etiqueta de eficiencia energética (EPC) A o B. Según estimaciones internas de CaixaBank, se prevé que la financiación de esta cartera de proyectos de energía renovable evitará liberar emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) por un total de 1,2 millones toneladas de CO2 al año, y la financiación del portfolio de inmuebles de alta eficiencia energética, ahorrará la emisión a la atmósfera de un total de 6,5 mil toneladas de CO2 al año.

Este bono vuelve a demostrar el alineamiento de la financiación con el modelo de banca social y responsable de CaixaBank. Esta estrategia está siendo reconocida por los inversores de renta fija que muestran cómo la entidad ha sabido reflejarla en un marco de bonos verdes, sociales y sostenibles creíble y sólido.

Quinta emisión bajo el marco ODS

Con esta emisión, CaixaBank se convierte en el banco europeo con más volumen de bonos ESG (medioambientales, sociales y de gobernanza) emitidos en el mercado de crédito euro: tres bonos verdes y dos bonos sociales, con un valor conjunto de 5.000 millones de euros.

La primera emisión de la entidad en septiembre de 2019, consistió en un bono social de 1.000 millones de euros a 5 años en formato de deuda senior no preferente con el objetivo de luchar contra la pobreza y crear empleo. Esa operación inaugural incluía préstamos de MicroBank a individuos o familias cuya suma de ingresos disponibles fuese igual o inferior a 17.200 euros, con el objetivo de financiar necesidades diarias como gastos en salud, educación o reparaciones en los hogares y vehículos, así como préstamos a autónomos y pymes en las regiones más desfavorecidas de España.

La segunda emisión, realizada en julio de 2020, fue un bono social COVID-19 de 1.000 millones de euros a 6 años, en formato de deuda senior preferente, cuyo objetivo era mitigar los efectos del COVID-19, a través de financiación a pymes y microempresas domiciliadas en las regiones españolas con menos de 19.665 euros por cápita, o con tasas de desempleo superiores al 16,69%. En estas dos primeras emisiones, los fondos captados se destinaron a promover el ODS número 8 “Trabajo decente y crecimiento económico”.

En la tercera, emitida en noviembre del año pasado, la entidad colocó su primer bono verde por un importe de 1.000 millones de euros a 6 años para financiar proyectos de energía renovable y edificios energéticamente eficientes.

En la cuarta emisión realizada en febrero de este año, CaixaBank emitió un bono verde a ocho años por importe 1.000 millones de euros también destinado a financiar proyectos de energía renovable y edificios energéticamente eficientes.