Reportaje

100 años de compromiso con La Seu d'Urgell

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En 1917 Europa estaba inmersa en plena Guerra Mundial. Eran años de fuerte inestabilidad tanto en el exterior como en el interior del país. Pese a todo esto, el 22 de septiembre de 1917 la noticia más importante en La Seu d'Urgell estaba en los bajos del número 18 de la Calle Mayor. “la Caixa” llegaba a la localidad y abría una oficina de atención a los vecinos.

Posteriormente, la Caja de Pensiones para la Vejez y de Ahorros de Cataluña y Baleares, “la Caixa”, absorbió la Caja de Ahorros del Sindicato Agrícola del Instituto Obrero de La Seu d'Urgell, por lo que, ante la llegada de un buen número de nuevos clientes, la oficina se trasladó al número 21 de la misma Calle Mayor.

”la Caixa” llegó a La Seu para prestar los servicios por los que fue fundada en 1904 por Francesc Moragas: estimular el ahorro y la previsión.

Con el aporte financiero se lograba que, en un contexto histórico muy complicado, cualquier familia dispusiese de autonomía y seguridad en su desarrollo vital.

Foto Brangulí © Archivo histórico de la Fundación Bancaria “la Caixa”

Con los años, “la Caixa”, hoy transformada en CaixaBank, se fue convirtiendo en un elemento más de la vida social y empresarial bajo la atenta mirada de los Pirineos. Incluso, como afirma Lluís Clotet, presidente de la cooperativa Cadí, en una entidad necesaria “para la vertebración del territorio”. La relación de Cadí y CaixaBank presume de longevidad, ya que la cooperativa se fundó en La Seu d'Urgell en el año 1915. “Tenemos una relación comercial de muchos años”, comenta Clotet, “y en cosas concretas o casos puntuales siempre tengo la colaboración de CaixaBank”.

“Una entidad muy servicial y muy dedicada a la empresa local”

“CaixaBank es una entidad muy servicial y muy dedicada a la empresa local”, nos cuenta Albert Fornesa, presidente de NaGroup, una empresa de ámbito internacional dedicada al transporte y la logística. “Fue una pequeña revolución que una entidad promoviese el ahorro”, asegura el empresario y economista Amadeu Gallar, para quien uno de los mayores atractivos de CaixaBank es su plataforma “ágil” para poder abonar los impuestos.

Esa evolución siempre ha ido de la mano con los tiempos que al país y la comarca les tocaba vivir, e incluso por delante. Poco a poco, la oficina de CaixaBank en La Seu pasó de tener solo a hombres como empleados, a que en la actualidad sean más las mujeres que trabajan para ofrecer un mejor servicio a los clientes. Esos mismos empleados recuerdan con cariño anécdotas que ya forman parte de la historia centenaria de la oficina, como el lanzamiento de Línea Abierta en 1997.

Había tan pocas conexiones a Internet en la zona que todos quedaban en el piso de un cliente para realizar la formación a los empleados de la oficina en la operativa del nuevo canal online de la entidad. O el apelativo con el que conocen a la oficina los clientes más veteranos: “la Caja de Oros”.

El porqué es un secreto que no confiesan, o quizá se perdió en el tiempo y se asumió como algo propio y cariñoso, igual que los nombres de los arroyos y caminos.

A través de la Obra Social, CaixaBank y la Fundación Bancaria “la Caixa” han devuelto a La Seu d'Urgell la confianza depositada en la entidad. Para el alcalde, Albert Batalla, esta vertiente de la presencia de CaixaBank en La Seu “ayuda a mantener la cohesión social de nuestra ciudad”.

Entidades sociales que trabajan en la comarca destacan la “estabilidad” que da a sus proyectos contar con el respaldo de la Obra Social “la Caixa”.

Empleados y vecinos de La Seu se preparan para el acto institucional con el que CaixaBank conmemorará el siglo de servicio a la comarca. Una cita en la que se renovará el compromiso de la entidad con la zona, además de agradecer la confianza que, década tras década, las gentes de La Seu d'Urgell han depositado en CaixaBank.

 
 

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