El presidente de CaixaBank, José Ignacio Goirigolzarri, ha asegurado hoy que toda empresa ha de contar con unos “principios y valores que deben ser la referencia de actuación diaria” y formar parte del “proceso de definición de estrategia”, ya que es “clave para la sostenibilidad de un proyecto”.
Durante su participación en la ceremonia de apertura del curso académico 2021-2022 de Esade-URL, en la que ha pronunciado la tradicional lección inaugural, el presidente de CaixaBank ha apuntado que las compañías han de “dotarse de unos criterios de actuación que sean reconocibles y practicados y que deben responder, necesariamente, al papel que la empresa entienda que debe jugar en la sociedad”.
Goirigolzarri ha explicado que “una empresa para ser sostenible tiene que ser viable financieramente”, si bien ha subrayado que, para que ello sea posible, “una empresa debe tener una propuesta de valor que consiga que sus clientes se encuentren satisfechos y que, además, tengan un alto grado de vinculación con la misma”. “Los clientes son la base de cualquier empresa. Sin ellos, ninguna empresa existiría”, ha asegurado.
Según el presidente de CaixaBank, “no se podrá conseguir que los clientes estén satisfechos si un proyecto empresarial no cuenta con un equipo motivado y comprometido. Y, desde luego, la sostenibilidad de un proyecto no será posible si no se consigue el reconocimiento o, al menos, una aceptación social”.
Además, Goirigolzarri ha asegurado que “los principios y valores de una organización tienen su plasmación y tangibilización práctica en la relación con otros y, sobre todo, con los equipos”.
En este sentido, ha subrayado que “es clave que las personas que trabajan en una organización se vean parte de un proyecto”. “Interiorizar esto significa rechazar conductas insolidarias y cortoplacistas”, ha defendido, para agregar que “el trabajo en equipo es sinónimo de lealtad y generosidad”.
“Impulsar el trabajo con otros y hacer sentir la importancia de formar parte de un proyecto me parecen claves para la felicidad de las personas en el ejercicio de su labor profesional. Y esto no está reñido con la valoración de las aportaciones individuales, que desde luego deben ser una referencia constante y permanente”, ha destacado.
Por otra parte, Goirigolzarri ha considerado “clave que las personas en una organización tengan enormes dosis de humildad intelectual, que se transmita a todo su ámbito”, pues “es lo que te permite estar abiertos a nuevas ideas y nuevas opiniones”.
Papel de la universidad
El presidente de CaixaBank ha destacado el importante papel que juega la Universidad en todo este proceso. “La universidad debe pretender formar personas que tengan un impacto real y positivo en la sociedad. Esto requiere, en primer lugar, que sean personas maduras, con criterio propio y formado, convencidas de que el futuro no está escrito, sino que depende de nosotros, de nuestra actitud y nuestro comportamiento”, ha asegurado.
“Creo que los alumnos deben salir con una clara convicción de que no puedes exigir a tus colaboradores lo que tú no estás dispuesto a hacer. Deben salir con una clara convicción: que si quieren que sus organizaciones se comporten por un código ético determinado, ellos deben ser ejemplo de su cumplimiento”, ha explicado Goirigolzarri, quien ha afirmado que “solo el ejemplo legitima el liderazgo”.
Por otra parte, ha querido dejar claro que “las universidades no pueden permanecer al margen de la sociedad” y que “se deben construir, crecer y evolucionar en colaboración y permanente relación con su entorno más cercano”.
Para el presidente de CaixaBank, “una universidad que aspire a la excelencia debe, además de ser referencia académica, tener un modelo que dé respuestas a preguntas como el encaje de la empresa en la sociedad y los requisitos para la sostenibilidad de un proyecto, la gestión y relaciones de los equipos humanos y la responsabilidad individual de la persona como parte de la empresa”.
